Después de pasar 10 maravillosos días en Koh Rong, pusimos la directa dirección a Phnom Phen parando antes un par de días en la zona rural de Kampot y Kep.
Tras hablar largo y tendido con viajeros y los chicos de Ashia Tapas, decidimos hacer base en Kampot y visitar Kep y alrededores alquilando una moto.
Llegamos a Kampot en una minivan que nos costó 6 Usd a cada uno de nosotros y pasamos las noches que estuvimos en esta zona en el Sebana Guest House por 7 Usd la noche.
Kampot es una ciudad pequeñita y encantadora en el sur del país, repleta de arquitectura francesa por todos los costados y rodeada por el río Prek Kampong. En uno de los puentes que atraviesa este río, los niños locales juegan a tirarse de lo mas alto del puente… ¡que atrevidos!
Casi todas las tardes que pasamos en Kampot, nos dimos el lujo de caminar junto al río y deleitarnos con la mezcla de colores que se forma al esconderse el sol tras esas montañas.
El mercado de esta pequeña localidad es posiblemente uno de los lugares más auténticos que hemos visitado nunca. Los olores, colores y sensaciones que vivimos en ese mercado tardaremos tiempo en olvidarlos y mira que hemos pateado unos cuantos ya. Visita más que recomendada siempre que seáis de estómago fuerte.
Como bien sabéis a estas alturas, nos encanta tratar de ayudar a los demás de alguna manera u otra. En Kampot no iba a ser menos así que hicimos que el Epic Arts Café fuese nuestro lugar de desayuno y relax durante nuestra estancia. El Epic Arts es una cafetería donde los trabajadores tienen deficiencias auditivas y vocales. Los pedidos se hacen a través de una hoja con dibujos y los chavales son super simpáticos. Debéis probar los pasteles de zanahoria… ummm!
En una de las calles perpendiculares al rio cercanas al centro, hay un restaurante muy atípico. El Ciao cuenta con unas pocas mesas, una escasa cocina y un cocinero italiano que os hará que os chupeis los dedos con su pasta fresca y pizza recién hecha. Si.. lo sabemos… no es comida camboyana, pero de vez en cuando se necesita salir de la rutina…jajaja.
ALREDEDORES DE KAMPOT
No tuvimos tiempo para visitar las cascadas de Tek Chhouu, pero si que visitamos el templo-cueva de Phnom Chhnork. Esta cueva, rodeada de una hermosa campiña, cuenta en su interior con un diminuto templo de ladrillo que data del siglo VII. Este laberinto de cuevas puede explorarse de la mano de alguno de los niños que esperan impacientes a la entrada. Nosotros lo hicimos y en algún momento nos dio una sensación muy bestia de respeto hacia la naturaleza…
Camino a Kep hicimos dos paradas, una porque se nos pinchó la moto y tuvimos que reparar la rueda… Gracias que pinchamos justo en frente de un taller y que nos entendimos con el mecánico que no hablaba nada de inglés… vaya panorama!! Señor agradable donde los haya. Hasta la fecha le damos un 10 a la amabilidad y el trato de los camboyanos!!
La segunda de las paradas fue en Phnom Sorsia, que cuenta con algunas cuevas naturales y un templo también digno de visitar.
Por ultimo, llegamos en nuestra super moto a Kep. Famosa entre los viajeros del sudeste asiático por el precio del marisco fresco… Cuando eres viajero y no turista, pocas veces puedes permitirte comer marisco, jejeje. Este pequeño pueblo costero se creo como lugar de disfrute para la alta sociedad francesa mientras la colonización. Tras estos vinieron los camboyanos mas adinerados que perderían la posesión de sus enormes villas durante la dictadura de los Jemeres Rojos.
Nada más llegar al pueblo desde Kampot hay un pequeño mercado de marisco donde se puede saborear cangrejos, gambas, navajas y etc por precios ridículos. Más allá hay una fila de 10 o 12 restaurantes donde la calidad del producto es la misma pero los precios llegan a triplicarse… cada uno que elija, por supuesto, nosotros comimos en el mercado. Bueno, bonito y barato!!
Nuestra ultima parada en la zona fue la plantación de pimienta de Soti’s, donde unos chicos germanos voluntarios del lugar nos pasearon y explicaron el cultivo de una de las mejores pimientas del mundo.
En este lugar tienen una tiendecita donde se puede comprar los diferentes tipos de pimientas, té y otros productos a precios razonables. También se pueden encontrar a muy buen precio en el mismo mercado de la ciudad, donde serás atendido por sus simpáticas y risueñas tenderas.
Interesante lugar, con gente encantadora. ¿Qué te ha parecido a ti? Anímate a dejaros un comentario.